¿Quién no recuerda el anuncio de la que tomaba su yogourth/preparado lácteo para solucionar sus diarreas o aumentar sus defensas?

El sistema inmune no estaba tan de moda como en los últimos tiempos, con tertulian@s que en los medios igual te hablan de vacunas como del cambio climático.

¿Qué relación tiene la microbiota con el sistema inmune?

Sabemos que gran parte de nuestras defensas tienen su hábitat en la pared intestinal, así que su integridad será básica para que todo funcione perfectamente y, la vida estresada en el cemento, las porquerías que comemos, o nos ponemos en el cuerpo, no ayudan. Pero los cambios en la microbiota dependen de factores q vienen de lejos, desde como nacemos o la leche que nos dieron, determinarán el que tengamos un tipo de microorganismos u otros habitando nuestras mucosas.

Cuando hay desequilibrios en ellas, la incorporación de nuevos batallones de aliados puede contribuir a la mejoría, dependerá de dónde, cuándo y en quién, utilizaremos mejor unos q otros.

Comparten su nombre en latín, y tenemos diferentes familias que seguro te suenan: Bifidobacterium, Lactobacillus,…y algunas que puede ni siquiera has escuchado como Akkermansia, y cada una, a su vez, tendrá unos integrantes con propiedades diferentes, así que no da igual uno q otro para tratar según qué.

¿Probióticos en vagina?

Cuando hace 20 años no teníamos probióticos vaginales en la farmacia, nos poníamos el yogourth, sin azúcar ni tropezones, con 1 jeringuilla antes de acostarnos en la vagina para repoblarla de lactobacillus y que, entre otras misiones, éstos fabricaran su ácido láctico y retornara la acidez al medio.

¿Qué diferencias hay entre un probiótico y un prebiótico? 

El probiótico sería el /los microorganismos que aportamos y el prebiótico es lo que le aporta energía para que pueda trabajar, que podemos proporcionárselo desde la dieta con fibra, kéfir, chucrut,… o con suplementos.

Ahora disponemos de pro y prebióticos, tópicos y orales para elegir, pero es muy importante que estudiemos cada caso individual, no se trata de comprarlos “porque a mi amig@ le ha ido bien”.

 No vale todo…

No son la panacea, no podemos pretender q sin hacer cambios en nuestra dieta o nuestro estilo de vida, la cápsula haga milagros, igual que si quiero un fármaco para adelgazar sin mover 1 dedo.

Evidencias científicas de los probióticos

En los últimos años han crecido de forma exponencial las publicaciones científicas y los ensayos clínicos sobre ellos y, todavía hay quienes niegan las evidencias, pero tristemente, la ignorancia es muy atrevida y no por hacer más ruido significa que se tenga razón, el problema no es sólo que ellos se lo pierdan, sino que a veces, pueden influir en pacientes que se verían beneficiados de su prescripción.

Para más información y si no las sigues aún, te recomiendo a @sariarponen @olallaotero y sus libros sobre el tema.

Si no lo viste, en un minuto te lo resumo de forma especial;)   (pínchalo para llegar)